Y ahora, más que nunca! En pocas semanas, hemos visto derrumbarse nuestra vida diaria y hemos tenido que decir adiós a un montón de cosas que pasaban desapercibidas, y resulta que ahora, las valoramos más que nunca porque son las que te hacen sentir, las que te dan vida, es decir, necesitamos abrazos, besos, juntarnos con los seres queridos, sentarnos en una terraza con un café o una cerveza y disfrutar de los amigos. Creo que estos meses han sido los mayores ejercicios espirituales que se puede tener y nos han cogido sin preaviso, de golpe. Hemos visto morir a miles de personas y a otras tantas luchar por salvarlas. La muerte y la vida, una vez más, frente a frente, demostrando cuanta solidaridad y valentía guarda el ser humano para dar en situaciones difíciles.
No sabemos a qué nos vamos a enfrentar los meses que vienen. Si la vacuna está cerca, si volverá a aparecer un nuevo brote. Ha sido un tiempo de reflexión para todos sobre cómo queremos que sean nuestras vidas de ahora en adelante, nuestros trabajos, nuestras ilusiones. La lista de valores la hemos puesto patas arriba pero seguro que apreciaremos mil veces más, esas cosas sencillas que dan vida. Y es que, realmente, todo eso que hemos echado de menos en estos días de confinamiento, es lo que queremos y debemos hacer en la vida. Todo lo demás, sobra.
En Afortunato hemos seguido tostando y vendiendo café, pero.. echamos de menos saborear los café con los clientes y amigos, que se escuchen risas y la música suene. Entonces nos sentiremos Afortunatos de nuevo!!
Ahora me doy cuenta que, hace ya 3 años que escribo este blog, y le puse por título “ El café que te da vida”…pues me reafirmo en ello y no lo cambio!!
¡Me ha gustado mucho!